¿Cómo potenciar la autoestima? Por María Jesús Álava Reyes
Todos y todas queremos y deseamos afecto, amar y sentirnos amados/as y contar con la aprobación de quienes nos rodean. El problema surge cuando dependemos emocionalmente de los demás. Entonces nos volvemos inseguros/as, vulnerables y débiles.
“Contar con unos niveles adecuados de autoestima constituirá la base de una buena salud física y emocional”.
Qué es la autoestima
La autoestima es la manera en que nos percibimos, tanto física como psicológicamente, el modo en que pensamos, cómo nos juzgamos y nos comportamos con nosotros mismos. En definitiva, es la opinión y la visión que cada persona tiene de sí misma.
La autoestima afecta a nuestra forma de ser y al sentido que le damos a nuestra valía personal; por ello repercute en la manera de posicionarnos, de actuar en el mundo y de relacionarnos con los demás.
¿En qué se sustenta?
En nuestros pensamientos, en nuestras creencias y nuestros valores; en la educación que hemos recibido, en los condicionantes de nuestra cultura y en la forma que interpretamos nuestra realidad.
La autoestima no es algo que se adquiere y se mantiene inamovible a lo largo del tiempo.
“Seremos más eficaces, y también más felices, si nos acostumbramos a valorar nuestras conductas. Estar a gusto con uno mismo no es una opción, es un requisito imprescindible para llevar una vida emocionalmente sana”.
¿Cómo podemos trabajar para fortalecerla?
Lo mejor para fortalecer nuestra autoestima es perdonarnos bien, querernos mejor, tener una actitud positiva y ser nuestros mejores amigos, ya que somos la única persona que siempre estará a nuestro lado. Y eso, como hemos comentado alguna vez, lo conseguiremos perdonándonos por nuestros fallos y queriéndonos por nuestros esfuerzos.
¿Cómo podemos educar a nuestros hijos en una buena autoestima?
Favoreciendo su seguridad y transmitiéndoles nuestra confianza en ellos. Les diremos lo que hacen bien, les reconoceremos sus esfuerzos, les animaremos en sus dificultades y nos mostraremos seguros ante sus posibilidades.
Principales pautas para conseguir una buena autoestima
- Aprender a pensar
Los pensamientos no ocurren porque sí, los producimos nosotros, son una creación de nuestro cerebro.
Cuando queramos saber lo que realmente piensa una persona, observemos lo que hace, no lo que dice.
- Aprender a manejar las emociones
Especialmente aprenderemos a manejar las emociones que nos hacen sentimos peor, como la ira, el miedo o la tristeza.
- Aprender respetar las críticas
Intentar gustarle a todo el mundo no es sano y resulta irreal.
Le mejor forma de blindar nuestra autoestima será dando la razón al “crítico” cuando la tenga, y cuando no sea así, o no nos convenza su argumentación, no entraremos en conflicto y nos abstendremos de caer en la provocación. Para ello, si es preciso, incluso dejaremos de prestar nuestra atención.
- Aprender a aceptar los errores
Recordemos que no hay errores, hay aprendizajes y nuevas opciones. Con frecuencia, los errores nos enseñan más que de los aciertos.
Reflexión final (*)
Hay personas que respetan profundamente a los demás, pero se olvidan de respetarse a sí mismas. ¡Sólo a través de tu propio respeto, construirás el edificio de tu autoestima!
(*) Reflexión extraída del libro de María Jesús Álava: “Saca Partido a tu Vida” Editado por La Esfera de los libros
